La exposición humana en las horas de mayor irradiación solar, cuando no se protegen la
piel y los ojos, es el riesgo más antiguo conocido de exposición laboral a radiación UV.
Dicha exposición es mayor cuando se trabaja en lugares donde la reflexión solar es muy
alta, tales como extensas superficies nevadas, grandes superficies arenosas o el agua.
Como ejemplo, se pueden citar los monitores de esquí, los socorristas, etc.
Con la descripción de puestos de trabajo con potencial riesgo, se intenta remarcar’que
el riesgo potencial depende del espectro de emisión de cada fuente y de su potencia
radiante. En general, cada caso debe evaluarse individualmente, ya que influyen además
otros factores tales como la distancia del puesto de trabajo al foco emisor, el tiempo de
exposición a la radiación, la utilización o no de ropa protectora, etc.
Si la emisión es de banda estrecha, por ejemplo en las lámparas germicidas a 254 nm, el
riesgo está bien definido. Por el contrario, si la emisión es de amplio espectro, se puede
tener un riesgo simultáneo de sobreexposición a radiaciones UV, Visible y/o lR, por
ejemplo, en la soldadura por arco. En general, los niveles de radiación lR-C de los arcos
de soldadura y las fuentes incandescentes son despreciables comparados con las
emisiones a longitudes de onda más cortas.
También puede haber exposición extralaboral a radiaciones ópticas: baños de sol,
deportes al aire libre, lámparas solares y fototerapia.
Cristian Ramirez liked this on Facebook.
Jesus Pacheco liked this on Facebook.