Algunas legislaciones definen accidente como: «todo suceso imprevisto y no deseado que interrumpe el desarrollo normal de una actividad y origina una o más de las
siguientes consecuencias:
- Lesiones personales.
- Daños materiales o pérdidas económicas».
En otras palabras, no se puede hablar de accidente si no ha habido lesiones o daños materiales
Asimismo, se define como incidente todo «suceso imprevisto y no deseado que interrumpe o interfiere en el desarrollo normal de una actividad sin consecuencias adicionales». Sucede por las mismas causas que se presentan en los accidentes, sin embargo, únicamente por cuestiones de azar no desencadenan en lesiones o daños.
En la figura de abajo se ilustra la diferencia entre accidente e incidente.
Tal y como se verá, a diferencia de las enfermedades profesionales o el malestar por el trabajo, que resultan de una agresión continuada que se puede detectar y corregir con el tiempo, el accidente es repentino y en muchos casos inesperado: invertir dinero en algo que puede o no ocurrir es causa de que en muchas ocasiones se tiente a la suerte, por considerar que no va a pasar nada. En otros casos, se desconoce la existencia de un peligro por quienes están expuestos al mismo.
Los incidentes se originan por unas causas determinadas que pueden ser previsibles si se analiza la génesis y la secuencia de cómo éstos suceden. Una vez que hayan
ocurrido y las consecuencias sean irremediables, es preciso aprovechar la lección para evitar su repetición tomando las medidas necesarias.
La recopilación detallada de los incidentes es una valiosa fuente de información que es conveniente aprovechar al máximo, para lo cual es importante que una serie de datos referentes a ellos mismos y a su entorno, queden registrados para su posterior análisis estadístico, que servirá para conocer la incidentalidad y sus circunstancias comparando entre secciones, empresas o sectores productivos. En este sentido, la medida del nivel de incidentalidad se realiza mediante unos índices calculados según los mismos criterios para que sean comparables.
Para diferenciar los accidentes de trabajo de las otras agresiones a la salud y bienestar de los trabajadores como consecuencia de su trabajo, nos fijaremos en la «dureza» del agresivo y en la velocidad de la producción del daño. Así, se tienen agresiones que causan malestar, insatisfacción u otros daños inespecíficos y que, aún prolongándose en el tiempo, no generan lesiones físicas o psíquicas claramente demostrables. Otras formas de agresión, cuando se repiten a lo largo de un determinado período, acaban produciendo enfermedades perfectamente diagnosticables (enfermedades profesionales: silicosis, saturnismo, sordera profesional…).
Por último, hay agresiones que actuando sólo una vez producen lesiones perfectamente diagnosticables de carácter leve, grave o mortal. Los accidentes de trabajo son los indicadores inmediatos y más evidentes de unas inadecuadas condiciones de trabajo y, dada su gravedad, la lucha contra ellos es el primer paso en toda actividad preventiva.
Algunas razones fundamentales acerca de por qué suceden los accidentes de trabajo son las siguientes:
- Por desconocimiento de los riesgos y su prevención.
- Por confianza en que los riesgos no van a generar precisamente hoy el accidente.
- Por desconocimiento de la verdadera magnitud de las consecuencias.
- Por una carga cultural negativa hacia el trabajo, que acepta como normal la existencia de accidentes (falta de cultura preventiva).
- Por la ausencia de un sistema de gestión de la prevención que permita un cumplimiento estructurado y sistemático de la legislación.
Los accidentes de trabajo no tienen una sola causa, sino que son una secuencia de una serie finita de fenómenos, conocidos como fenómenos causales, y que se pueden
agrupar en fuentes de accidentes (ajenos al hombre que trabaja), y conductas de accidentes (propias del hombre que trabaja).
Cuando esta serie de fenómenos coincide en un momento de tiempo (t) dado, en un lugar (I) físico determinado y se presentan conforme a un orden (o) definido, aparece el fenómeno del accidente de trabajo, tal como se recoge esquemáticamente en la figura de abajo.
Un ejemplo de accidente sería el siguiente: estando un operario accionando una taladradora eléctrica, se rompió la broca y, al salir proyectada, le alcanzó.
El orden y secuencia de los hechos, seria la siguiente:
causa 1 útil en movimiento
Causa 2 rotura de útil
Causa 3 Proximidad del trabajador
Esquemáticamente se representa de la forma que se ilustra abajo
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